Dolmor

Nombre: Dolmor

Apellido: Ur

Especie: Duros


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Edad inicial: 24 (contando que un Duros se considera adulto con 15 años)
Facción: Libre
Profesión: Era científico, pero los altibajos de la vida han querido que ha día de hoy sea un superviviente, y lo más parecido a ésto es un contrabandista.

Rango: Bandido

Descripción:
Físico:
Con sus 180cm de estatura y sus 75 kg de peso, el aspecto de Dolmor no difiere demasiado de cualquier otro Duros; es alto, delgado, con una gran cabeza sin pelo y unos ojos grandes de un color naranja miel con unas pupilas horizontales. Además de una gran cicatriz que va desde su pecho hasta su abdomen. (los duros son muy parecidos a los neimoidianos)

Psicológica: Dolmor siempre ha sido reservado, reflexivo, muy observador y educado, aunque suele emocionarse con facilidad, ha aprendido bien a esconder sus sentimientos. Durante la primera etapa de su vida como científico, se dejó llevar por sus aspiraciones y su ego, pero la vida le enseñó una dura lección la cual ha aprendido muy bien. Ahora, como buscavidas, Dolmor sigue siendo ese tipo inteligente y reflexivo, pero sus modales se han embrutecido bastante, ahora, acostumbrado a los bajos fondos y a luchar por ganar esos créditos que le permitan comer, este duros parece un blaster de repetición a la hora de soltar palabras malsonantes e insultos... lo cual suele ser en situaciones de peligro y en momentos de alta tensión, algo común en su vida actual.
Dolmor se siente tremendamente culpable de sus acciones como científico en las que llegó a experimentar con especies inteligentes. Suele torturarse con su sentido de culpabilidad y frecuentemente se levanta por las noches empapado en sudor para comenzar a llorar. Pesadillas, recuerdos horribles de los que él es el principal causante. En muchas ocasiones, Dolmor piensa que su vida actual es un justo castigo por sus “crímenes”, y que es un simple despojo que no merece más que una muerte lenta y dolorosa. Su sueño más repetido es aquel en el que sujetos de los experimentos le observan mientras duerme mientras le señalan como el culpable de su sufrimiento y muerte... en el mejor de los casos. Por todo ello, en muchos momentos se siente desganado y triste, amén de culpable por seguir luchando por vivir un día más a pesar de todo el dolor que ha causado y de que se considera en muchos momentos un gusano rastrero.

Nave:

- Nombre: La lata
- Características: Se trata de una nave ligera de transporte de unidades médicas que robó en su huida de la estación-laboratorio en la que trabajaba. Dolmor ha borrado todo indicio de su pasado y no de manera sutil, por lo que su aspecto es de una auténtica chatarra maltratada.
- Clase: Transporte. Nave pequeña para transportar como mucho a dos científicos y materiales médicos entre estaciones de investigación. Sus antaño rasgos elegantes han sido convertidos por Dolmor en una viva imágen de su estado psíquico, una antigua belleza destartalada y destrozada, que no llamaría la atención ni de el más bajo de los rateros
- Imagen y/o Descripción: Nave de elegantes rasgos venida a menos, con formas suavizadas y redondeadas (parecida a un delfín), morro picudo pero no acabado en punta. Restos de la pintura blanca original decoran la chapa, con raspones a conciencia (realizados para borrar los símbolos de la compañía a la que perteneció) Su interior denota un diseño funcional y bien adornado, pero es sólo una sombra de lo que fue. Los cables se encuentran fuera de sus recipientes y varios de los símbolos han sido raspados con objetos punzantes a conciencia y muchos de los indicadores están fundidos o rotos. Denota una absoluta falta de aprecio hacia la nave y una dejadez total de su mantenimiento. Las dos pequeñas alas que posee dejan ver el color del metal en el que originalmente fueron concebidas, se ve a la legua que para Dolmor esta nave no es más que un doloroso recuerdo necesario para su supervivencia.

Spoiler:

Historia:

Dolmor se crió en una familia humilde de Duros en Coruscant. De pequeño destacó por su gran inteligencia y su manía de intentar desmontar todo para ver como funcionaba. Se graduó relativamente joven (para un duros, 18 años) en la escuela de ingeniería genética, lo que propició que las grandes corporaciones científicas se fijaran en él. En este momento, Dolmor comete el mayor error de su vida, accediendo a las seductoras ofertas de trabajo de una nueva corporación científica “Nuevo Amanecer” compuesta principalmente por Neimoidianos y cuyo capital era exclusivo de miembros de esta raza.
Durante su estancia como científico en una de las estaciones de investigación del borde exterior de esta corporación, aprendió que lo mejor era callarse la mayoría de sus pensamientos para que “sus primos” no comenzaran a verlo como un auténtico peligro para sus investigaciones. Durante esa etapa de su vida (comenzó a trabajar con 19 años en la estación espacial-laboratorio) Dolmor destacó como una gran promesa de la ciencia, pero se dejó llevar por sus aspiraciones, encontrando la manera de modificar un gas para que alterara el sistema nervioso de cualquier ser vivo, mutándolo.

Pecando de inocencia y dejándose llevar por las promesas de fama galáctica reconocida, Dolmor no intuyó que aquellos seres experimentaron con ese gas para crear una raza de super soldados mutados que se comportaran de manera dócil. Pero lo peor estaba aún por venir, cuando Dolmor fue informado, y conoció que estaban experimentando con seres inteligentes para ello, no supo que hacer, y por puro miedo, siguió trabajando en el proyecto, tratando de primera mano con sus “especímenes”, el miedo le venció. No se sabe qué ocurrió exactamente, pero hubo un problema y varios de los sujetos experimentales escaparon de sus celdas de contención sembrando el caos y la destrucción a su paso.

Dolmor, dándose cuenta del tremendo error que había cometido, intentó, mientras todos sus compañeros escapaban sin mirar atrás, salvar a una pareja de asustados bothans que habían llegado hacía poco seguramente secuestrados. Corriendo en dirección contraria a la de sus compañeros, Dolmor se topó de cara con una de sus creaciones, un Kel Dor tan mutado que no se sabía donde empezaba su cabeza y acababa su brazo. El golpe fue tremendo y no sólo físico, pues aquella bestia brutal con odio en sus ojos era uno de sus sujetos experimentales... El tajo le llegó desde el pecho al abdomen, pero la bestia siguió su camino buscando más víctimas, quizá dándole por muerto.

Se arrastró hasta la celda de los Bothans, pero, con su cuerpo maltrecho y poco entrenado, sólo pudo intentar romper el cristal de contención mientras veía como una de sus horripilantes creaciones mutilaba salvajemente a la pareja. Nunca podrá olvidar sus miradas de espanto. No sabe ni cómo llegó a una pequeña nave de transporte que le sacó medio muerto de aquella pesadilla que él había contribuido a crear, fue su espíritu de supervivencia el que le guió entre seres monstruosos, el que le hizo realizarse una cura con un polvo ácido especial que borraba el olor a sangre (el cual le dejó irremediablemente esa cicatriz), fue ese espíritu el que le hizo correr y huir de ese infierno, pero esa es otra historia.

La estación espacial fue destruida y se le dio por muerto al igual que más del 90% de los trabajadores de aquella estación/laboratorio. El escándalo nunca vio la luz, se achacó la explosión a un desagradable fallo central en el sistema interno que afectó a la autodestrucción de la estación. Nadie buscó ni indagó más... se dio simplemente por cierto.

El tiempo ha pasado desde entonces y este Duros malvive como puede trapicheando y viviendo de lo que puede. La mayoría de los días duerme en un sucio colchón sobre el suelo en una húmeda habitación o en su nave, trabajando de cualquier cosa y en cualquier cosa, perturbado de seguir pretendiendo vivir a pesar de que, según él mismo, no lo merece.
Ahora mismo, a Dolmor no le importa ni la república ni los sith, pero sin duda, cuando la opción sea determinante, elegirá a la república, pues los sith representan todo lo malvado que lleva en su alma. Por ahora, y mientras los trabajos sean sencillos, no tiene inconveniente mientras pueda seguir comiendo, pero quizá esa ansia de supervivencia venga dada por un deseo oculto de contar lo que realmente pasó, aunque con ello admita el horror que causó, quizá por ello Dolmor huyó de aquella nave con datos claros y concisos de todo el infierno desatado... “¿Redención?” Suele pensar a menudo... “La redención es para los vivos” suele responderse a sí mismo. A veces da la sensació de que disfruta siendo deprimente.

Antes que nada Bienvenifo a SWR.

Tu Ficha no parece tener problemas, mas sin embargo te doy un consejito. Intenta dividir entre párrafos, asi quedará mejor ordenado y facilitaras la lectura.

Buehno, sin nada mas que decir que desearte una Linda, Larga y Placentera Estadia.

FICHA ACEPTADA

Listo para Rolear

Nota:

Como ya te indico Revan, las fichas llevan su formato, por lo que te agradeceria que utilizaras el formato correcto, que es el siguiente:

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