Exan.
4 participantes
Página 1 de 1.
Exan.
Nombre: Exan
Apellido: San-Bel (Lo acogió por su maestro)
Especie: Tusken (Morador de las arenas)
Edad: Desconocida, pero aparenta dentro de lo que cabe unos 25.
Facción: Neutral.
Profesión: Jedi Gris.
Rango: Maestro de la Fuerza
Descripción:
Físico: De aspecto humanoide, no se conoce demasiado de el, tan solo que su cuerpo esta totalmente vendado, desde su cabeza hasta los dedos de los pies, tan solo sus ojos, su boca y lo que parece su nariz están libres de vendas aunque cubiertos con numerosos artilugios para su posible supervivencia. Carece de bello corporal, cosa entendible, aunque tampoco se podría saber con seguridad, pero quizás con el calor del desierto, la sudoración y el entrenamiento duro es posible que lo haya perdido. Aparte de lo que rodea a su cuerpo todo el tiempo, unos ropajes más bien terrosos cubren su cuerpo sin restarle movilidad más una toga de un color mas oscuro que lo cubre por encima de las ropas para cubrir todo lo posible su cuerpo y ocultar su rostro. Lleva unas botas de cuero bastante buenas a conjunto con la toga.
Psicológica: Con una sola palabra se podía definir a este Tusken civilizado, serio, ni una mas ni una menos. Su forma de hablar es notable, quien diría que un ser del desierto pudiera controlar tanto la dialéctica, claramente, nadie ha visto su cara, por eso es llamado entre sus allegados como el hombre sin rostro, un alegre y significativo seudónimo. Tranquilo y calmado, son indudables en sus condiciones normales, nadie le ha visto enfadado, nunca lo hace, quien lo ha visto hablar dicen que hipnotiza con la mirada que nadie ve.
Atributos:
Fuerza: 30
Destreza: 30
Sabiduría: 27
Inteligencia: 27
Carisma: 26
Habilidades:
Persuadir
Observar
Dotes:
Especialista en Sable Laser
Maestría en Duelos
Maestría en Combate con dos armas
Maestría en Preparación Física
Maestría en Dureza
Maestría en Ataque Poderoso
Destrucción Tecnológica
Supervivencia Extrema
Poderes:
Velocidad Maestro
Oleaje de Fuerza
Tormenta de Fuerza
Destrozar Mente
Tirón – Lvl 2
Herir
Equipo: Por defecto:
- Vestimenta: Ya explicada en Físico
- Sable Laser: Imagen -> [Solamente los administradores pueden ver esta imagen] Color: Amarillo
- Cinturón Epra: Cinturón de trabajo adaptado por la compañía Epra en el que se encuentran una serie de pequeños compartimentos donde se pueden guardar todo tipo de cosas.
- Créditos: 3000.
Historia:
Un Tusken, ¿Quién se atrevería a decir que volvería aparecer un ser de una raza tan primitiva con un nivel de fuerza tan enorme?, nadie afirmaría a verlo visto, nadie podría decir de alguna forma que este ser existió y si existe nadie lo conoce, su entorno más cercano sabe guardar las espaldas lo mismo que él se las guarda a ellos. Para conocer a este ser de extraña procedencia, tendríamos que remontarnos al lejano mundo de Tatooine, donde el maestro y el aprendiz se encontraron por primera vez.
El maestro, Seon San-Bel, también conocido por el lado oscuro como Lord Seon, un antiguo Sith renegado que acabo cayendo en lo que sería en desgracia para los Sith y en la cordura y la sensatez por la Orden Jedi. Se exilio y nadie volvió a saber de él, consiguió dominar un poder de la fuerza totalmente desconocido, que consistía en ocultar totalmente el poder de la fuerza aunque estuviera usándolo, y fue por ello por lo que pudo sobrevivir a la posible represión de los Sith. Seon, durante su huida y su cambio de bando, pensó en morir, pero aquello no arreglaría todo el dolor que causo en el pasado a la misma Orden por lo que quiso ayudar pero tan solo verían en él a alguien en quien desconfiar, por lo que se rindió a la evidencia y morir en el planeta donde se oculto Tatooine.
Durante dos largos año vago por las vastas llanuras desérticas de Tatooine subsistiendo con lo que podía encontrar y cazar, quería sufrir como nadie hubiera sufrido. Su camino lo llevo hasta una gran colina de arena, su sentido de la fuerza le indico que allí había algo de gran poder, quizás un Sith, ¿un Jedi?, ¿Cómo lo había localizado?, ¿Era imposible?, había tomado precauciones para que aquello no sucediera, sin duda había llegado el día en el que pagara todos sus crímenes, Seon empuño su sable con suavidad, esperando su muerte.
Subía la colina, con tranquilidad, recibiendo a la muerte para que lo llevara con tranquilidad, pero la cara de sorpresa que se le quedo al ver que en el suelo, en aquel ardiente suelo se hallaba un pequeño niño de no más de 6 años, cubierto en vendas y totalmente agotado, exhausto, podría definirlo como que se estaba muriendo. El antiguo Sith no sabía qué hacer, si los Sith lo encontraran, lo guiarían hacia el lado oscuro, si lo mataba de esa manera nadie podría corromperlo, si lo encontrara algún Jedi, quizás y solo entonces, podría estar a salvo. Su decisión fue irrevocablemente, llevárselo y ayudarlo, su misión en este mundo aun no había terminado.
Pasaron dos largos meses, las heridas del pequeño Tusken, se sanaron, pero los idiomas de ambos no congeniaron demasiado, por lo que tuvieron que empezar casi de principio, aquel Sith se convirtió en todo un maestro, le enseño su idioma y le enseño unos tantos mas para que pudiera relacionarse con mas seres galácticos, su vida estaría más llena de dialéctica. No paso menos de un año hasta que terminaron de conjugar algunos idiomas correctamente, no perfectamente, pero a un nivel aceptable, en los siguientes años las largas charlas arreglarían aquellos desperfectos idiomáticos hasta la perfección.
El siguiente paso del maestro Seon, fue hablarle de la Fuerza, debía llevarle al camino que mas conocía, el lado oscuro, pero antes de ello tendría que explicarle como protegerse de el, y ello fue un duro trabajo para ambos, entre el calor diario y el frio nocturno, fortalecieron el débil cuerpo del Tusken, mientras que el conocimiento se impartía en las tardes cuando la temperatura era más agradable por las mañanas le enseñaba el manejo de un sable laser, pero de madera, quería inculcarle la fuerza necesaria en los golpes, como en su destreza.
Diez años pasaron, desde que el joven Tusken se recupero de sus heridas, su maestro le enseño todo lo que tenía que saber, la fuerza, su conocimiento y el porqué usaba poderes del lado oscuro para ayudar a proteger el bien, todo había quedado explicado, la función de su maestro había terminado, y la supervivencia en el desierto había sido superada. Tan solo le faltaba una cosa, un verdadero combate real, no tenían un objetivo por lo que el maestro reto al aprendiz. Los movimientos de ambos eran gráciles, y se notaba que el cuerpo del Tusken llevaba las de ganar, pero la voz de la experiencia sabia mas y la multitud de combates los ganaba el maestro. Cuando la veintena de edad del Tusken se acercaba, el pequeño Exan, que es así como lo llamo, ya comenzaba a cogerle terreno al maestro y como se decía, el aprendiz ya había superado al maestro en todo, y según el dogma de los Sith, la muerte del maestro se llevara a cabo por el aprendiz cuando este lo supere, pero desgraciadamente para los Sith, ellos dos no seguían su dogma, ellos eran quienes eran, protectores.
El veinte cumpleaños de Exan fue trágico, la muerte de Seon se acercaba lentamente hasta que la cogió, ni una lagrima se derramo por las lentes del Tusken, si un solo moco colgando por el respiradero, tan solo el maestro le indico que es lo que debía hacer de ahora en adelante, el acepto su cometido. Su cuerpo por fin descanso en paz, había redimido sus pecados con su muerte y con la enseñanza de un aprendiz envuelto en la bondad y el poder del lado oscuro.
Tras la muerte del maestro, se embarco en un viaje, a la capital de la república, Coruscant, donde nadie lo recibió, su vida seria en la sombra, su ropa se convertiría en su mejor refugio, su lugar seguro una taberna donde conoció de todo, pero sin duda a un gran compañero que le ayudaría en hacer su trabajo, cuál era su trabajo, su amigo del senado aun no lo sabia, pero lo averiguaría rápido.
Y pasaron cinco años, cinco largos años en los que desde las sombras ha estado ayudando a la república, dándoles mensajes, enviándoles objetivos para desmantelar y llevar al lado oscuro a la ruina, la Orden no sabe que existe pero saben que alguien les está ayudando, no saben cual será su siguiente paso, pero lo que tienen muy claro es que sea quien sea, tiene unos buenos contactos.
Apellido: San-Bel (Lo acogió por su maestro)
Especie: Tusken (Morador de las arenas)
Edad: Desconocida, pero aparenta dentro de lo que cabe unos 25.
Facción: Neutral.
Profesión: Jedi Gris.
Rango: Maestro de la Fuerza
Descripción:
Físico: De aspecto humanoide, no se conoce demasiado de el, tan solo que su cuerpo esta totalmente vendado, desde su cabeza hasta los dedos de los pies, tan solo sus ojos, su boca y lo que parece su nariz están libres de vendas aunque cubiertos con numerosos artilugios para su posible supervivencia. Carece de bello corporal, cosa entendible, aunque tampoco se podría saber con seguridad, pero quizás con el calor del desierto, la sudoración y el entrenamiento duro es posible que lo haya perdido. Aparte de lo que rodea a su cuerpo todo el tiempo, unos ropajes más bien terrosos cubren su cuerpo sin restarle movilidad más una toga de un color mas oscuro que lo cubre por encima de las ropas para cubrir todo lo posible su cuerpo y ocultar su rostro. Lleva unas botas de cuero bastante buenas a conjunto con la toga.
Psicológica: Con una sola palabra se podía definir a este Tusken civilizado, serio, ni una mas ni una menos. Su forma de hablar es notable, quien diría que un ser del desierto pudiera controlar tanto la dialéctica, claramente, nadie ha visto su cara, por eso es llamado entre sus allegados como el hombre sin rostro, un alegre y significativo seudónimo. Tranquilo y calmado, son indudables en sus condiciones normales, nadie le ha visto enfadado, nunca lo hace, quien lo ha visto hablar dicen que hipnotiza con la mirada que nadie ve.
Atributos:
Fuerza: 30
Destreza: 30
Sabiduría: 27
Inteligencia: 27
Carisma: 26
Habilidades:
Persuadir
Observar
Dotes:
Especialista en Sable Laser
Maestría en Duelos
Maestría en Combate con dos armas
Maestría en Preparación Física
Maestría en Dureza
Maestría en Ataque Poderoso
Destrucción Tecnológica
Supervivencia Extrema
Poderes:
Velocidad Maestro
Oleaje de Fuerza
Tormenta de Fuerza
Destrozar Mente
Tirón – Lvl 2
Herir
Equipo: Por defecto:
- Vestimenta: Ya explicada en Físico
- Sable Laser: Imagen -> [Solamente los administradores pueden ver esta imagen] Color: Amarillo
- Cinturón Epra: Cinturón de trabajo adaptado por la compañía Epra en el que se encuentran una serie de pequeños compartimentos donde se pueden guardar todo tipo de cosas.
- Créditos: 3000.
Historia:
Un Tusken, ¿Quién se atrevería a decir que volvería aparecer un ser de una raza tan primitiva con un nivel de fuerza tan enorme?, nadie afirmaría a verlo visto, nadie podría decir de alguna forma que este ser existió y si existe nadie lo conoce, su entorno más cercano sabe guardar las espaldas lo mismo que él se las guarda a ellos. Para conocer a este ser de extraña procedencia, tendríamos que remontarnos al lejano mundo de Tatooine, donde el maestro y el aprendiz se encontraron por primera vez.
El maestro, Seon San-Bel, también conocido por el lado oscuro como Lord Seon, un antiguo Sith renegado que acabo cayendo en lo que sería en desgracia para los Sith y en la cordura y la sensatez por la Orden Jedi. Se exilio y nadie volvió a saber de él, consiguió dominar un poder de la fuerza totalmente desconocido, que consistía en ocultar totalmente el poder de la fuerza aunque estuviera usándolo, y fue por ello por lo que pudo sobrevivir a la posible represión de los Sith. Seon, durante su huida y su cambio de bando, pensó en morir, pero aquello no arreglaría todo el dolor que causo en el pasado a la misma Orden por lo que quiso ayudar pero tan solo verían en él a alguien en quien desconfiar, por lo que se rindió a la evidencia y morir en el planeta donde se oculto Tatooine.
Durante dos largos año vago por las vastas llanuras desérticas de Tatooine subsistiendo con lo que podía encontrar y cazar, quería sufrir como nadie hubiera sufrido. Su camino lo llevo hasta una gran colina de arena, su sentido de la fuerza le indico que allí había algo de gran poder, quizás un Sith, ¿un Jedi?, ¿Cómo lo había localizado?, ¿Era imposible?, había tomado precauciones para que aquello no sucediera, sin duda había llegado el día en el que pagara todos sus crímenes, Seon empuño su sable con suavidad, esperando su muerte.
Subía la colina, con tranquilidad, recibiendo a la muerte para que lo llevara con tranquilidad, pero la cara de sorpresa que se le quedo al ver que en el suelo, en aquel ardiente suelo se hallaba un pequeño niño de no más de 6 años, cubierto en vendas y totalmente agotado, exhausto, podría definirlo como que se estaba muriendo. El antiguo Sith no sabía qué hacer, si los Sith lo encontraran, lo guiarían hacia el lado oscuro, si lo mataba de esa manera nadie podría corromperlo, si lo encontrara algún Jedi, quizás y solo entonces, podría estar a salvo. Su decisión fue irrevocablemente, llevárselo y ayudarlo, su misión en este mundo aun no había terminado.
Pasaron dos largos meses, las heridas del pequeño Tusken, se sanaron, pero los idiomas de ambos no congeniaron demasiado, por lo que tuvieron que empezar casi de principio, aquel Sith se convirtió en todo un maestro, le enseño su idioma y le enseño unos tantos mas para que pudiera relacionarse con mas seres galácticos, su vida estaría más llena de dialéctica. No paso menos de un año hasta que terminaron de conjugar algunos idiomas correctamente, no perfectamente, pero a un nivel aceptable, en los siguientes años las largas charlas arreglarían aquellos desperfectos idiomáticos hasta la perfección.
El siguiente paso del maestro Seon, fue hablarle de la Fuerza, debía llevarle al camino que mas conocía, el lado oscuro, pero antes de ello tendría que explicarle como protegerse de el, y ello fue un duro trabajo para ambos, entre el calor diario y el frio nocturno, fortalecieron el débil cuerpo del Tusken, mientras que el conocimiento se impartía en las tardes cuando la temperatura era más agradable por las mañanas le enseñaba el manejo de un sable laser, pero de madera, quería inculcarle la fuerza necesaria en los golpes, como en su destreza.
Diez años pasaron, desde que el joven Tusken se recupero de sus heridas, su maestro le enseño todo lo que tenía que saber, la fuerza, su conocimiento y el porqué usaba poderes del lado oscuro para ayudar a proteger el bien, todo había quedado explicado, la función de su maestro había terminado, y la supervivencia en el desierto había sido superada. Tan solo le faltaba una cosa, un verdadero combate real, no tenían un objetivo por lo que el maestro reto al aprendiz. Los movimientos de ambos eran gráciles, y se notaba que el cuerpo del Tusken llevaba las de ganar, pero la voz de la experiencia sabia mas y la multitud de combates los ganaba el maestro. Cuando la veintena de edad del Tusken se acercaba, el pequeño Exan, que es así como lo llamo, ya comenzaba a cogerle terreno al maestro y como se decía, el aprendiz ya había superado al maestro en todo, y según el dogma de los Sith, la muerte del maestro se llevara a cabo por el aprendiz cuando este lo supere, pero desgraciadamente para los Sith, ellos dos no seguían su dogma, ellos eran quienes eran, protectores.
El veinte cumpleaños de Exan fue trágico, la muerte de Seon se acercaba lentamente hasta que la cogió, ni una lagrima se derramo por las lentes del Tusken, si un solo moco colgando por el respiradero, tan solo el maestro le indico que es lo que debía hacer de ahora en adelante, el acepto su cometido. Su cuerpo por fin descanso en paz, había redimido sus pecados con su muerte y con la enseñanza de un aprendiz envuelto en la bondad y el poder del lado oscuro.
Tras la muerte del maestro, se embarco en un viaje, a la capital de la república, Coruscant, donde nadie lo recibió, su vida seria en la sombra, su ropa se convertiría en su mejor refugio, su lugar seguro una taberna donde conoció de todo, pero sin duda a un gran compañero que le ayudaría en hacer su trabajo, cuál era su trabajo, su amigo del senado aun no lo sabia, pero lo averiguaría rápido.
Y pasaron cinco años, cinco largos años en los que desde las sombras ha estado ayudando a la república, dándoles mensajes, enviándoles objetivos para desmantelar y llevar al lado oscuro a la ruina, la Orden no sabe que existe pero saben que alguien les está ayudando, no saben cual será su siguiente paso, pero lo que tienen muy claro es que sea quien sea, tiene unos buenos contactos.
Última edición por Exan el Mar Mayo 05, 2009 9:48 pm, editado 2 veces
Exan- Maestro de la Fuerza
- Cantidad de envíos : 18
Fecha de inscripción : 23/01/2009
Hoja de Personaje
Habilidades/Dotes/Poderes:
Re: Exan.
Mandame por MP las dotes y poderes creados con una breve descripcion. Por lo demás:
Ficha Aceptada
Te tengo que crear un rango y todo ¬¬u
Ficha Aceptada
Te tengo que crear un rango y todo ¬¬u
Espíritu Supremo- Admin
- Cantidad de envíos : 430
Fecha de inscripción : 23/01/2009
Hoja de Personaje
Habilidades/Dotes/Poderes:
Re: Exan.
Alaaa, el primer Moradorcito de las Arenas qué tenemos por aquí, ya nos veremos por las dunas de Tatooine ^^
Zolrak- Guerrero Sith
- Cantidad de envíos : 25
Fecha de inscripción : 02/05/2009
Hoja de Personaje
Habilidades/Dotes/Poderes:
Re: Exan.
Ficha denegada
1) no puiedes ser cazarrecopensas y tener fuerza jedi ....
2) siendo eso tampoco puedes ser jedi y llevar blasters o tener habilidad de blasters
3) tus habilidades estan erroneas cambialas al nivel dependiendo de la prueba que te hagna antes el admin
los 300 creditos son solo para comerciantes
edita eso por ahora tu ficha esta Denegada
1) no puiedes ser cazarrecopensas y tener fuerza jedi ....
2) siendo eso tampoco puedes ser jedi y llevar blasters o tener habilidad de blasters
3) tus habilidades estan erroneas cambialas al nivel dependiendo de la prueba que te hagna antes el admin
los 300 creditos son solo para comerciantes
edita eso por ahora tu ficha esta Denegada
Kasius- Civil
- Cantidad de envíos : 23
Fecha de inscripción : 30/04/2009
Hoja de Personaje
Habilidades/Dotes/Poderes:
Re: Exan.
Creo que el asunto ya esta arreglado asique de igual forma cambio lo que hace falta como el blaster ( que iba a ser de pega) y que me faltaba el color del sable.
Exan- Maestro de la Fuerza
- Cantidad de envíos : 18
Fecha de inscripción : 23/01/2009
Hoja de Personaje
Habilidades/Dotes/Poderes:
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.